
A sus 55 años, Groucho es una leyenda viviente en la Alianza para la Conservación del Zoológico de Denver, y supera con creces la esperanza de vida promedio de 47 años para los elefantes asiáticos en peligro de extinción. Como el miembro más antiguo de nuestra manada de solteros en Toyota Elephant Passage, Groucho disfruta del mismo cuidado físico de primera calidad que todos nuestros elefantes, pero su equipo de cuidado también invierte en algo igual de importante: su mente.
Recientemente, nuestros especialistas en cuidado animal diseñaron un programa de entrenamiento cognitivo personalizado para ayudar a Groucho a mantener su agudeza mental a medida que envejece. Inspirado en el entrenamiento avanzado que ya disfrutan los miembros más jóvenes de la manada, como BodhiEstos juegos mentales están adaptados a las necesidades únicas de Groucho y a su estilo de aprendizaje.
El nuevo juego de Groucho puede parecer simple, pero es un ejercicio mental. Se le presenta una hilera de botes, algunos vacíos, otros con un aroma distintivo: granos de café. Su tarea es oler cada bote e indicar el que contiene café levantando un pie delantero. Para mantener el juego impredecible, su equipo varía la secuencia y a veces añade un aroma distractor, como el de limón, para que piense mejor.
“Algunos días lo consigue a la primera, y otros días volvemos a empezar varias veces”, dice Lauren Cahill, especialista en cuidado animal. La clave es que nunca sabe cuándo aparecerá el aroma a café. Esa imprevisibilidad lo mantiene enganchado.
Al principio, Groucho se mostró cauteloso y a veces confundido por la nueva rutina. Sus dedicados cuidadores se lo tomaron con calma, usando refuerzo positivo y sesiones cortas y gratificantes para fortalecer su confianza. Tras casi dos meses estancado en el mismo paso de entrenamiento, algo encajó y ahora Groucho espera con ilusión el reto.
"Incluso deja heno, su merienda favorita, cuando ve los botes", dice Cahill. "Para Groucho, eso es muy importante". La capacitación también ha fortalecido su vínculo con su equipo de atención, algo especialmente significativo dado que no siempre ha estado dispuesto a colaborar estrechamente con el personal femenino.

Los beneficios van más allá del juego mental en sí. Su equipo de atención ha notado que Groucho muestra más entusiasmo en todas sus sesiones de entrenamiento, incluso en los ejercicios físicos. "Es como si pensara diferente, más como los niños más pequeños", dice Cahill.
Y aún hay más por delante. Los futuros desafíos cognitivos podrían incluir emparejar formas, copiar el comportamiento de otro elefante o juegos de emparejar con muestras, todos diseñados para mantener la mente de Groucho tan activa como su cuerpo.
La historia de Groucho nos recuerda que cuidar de animales mayores implica abordar su bienestar integral: físico, emocional y mental. Los invitamos a visitar Toyota Elephant Passage para ver a Groucho y al resto de nuestra manada de elefantes solteros, y aprender más sobre las innovadoras maneras en que apoyamos a estos increíbles animales.
